
Las certificaciones de calidad ISO representan una forma de garantizar que las empresas públicas o privadas puedan proporcionar un producto, servicio o sistema de acuerdo con los requisitos de las agencias reguladoras y los clientes.
El acrónimo ISO significa Organización Internacional para la Estandarización. Esta entidad está enfocada en la estandarización y regulación de sistemas para garantizar la calidad de los procesos internos en los diferentes segmentos del mercado.
En Brasil, la organización está vinculada a la Asociación Brasileña de Normas Técnicas (ABNT), estableciendo una norma que no solo aumenta la competitividad de la empresa, sino que redefine los procedimientos, convirtiéndola en un referente.
El objetivo de ISO es desarrollar preceptos que puedan ser adoptados por países de todo el mundo, con miras a fomentar el comercio de bienes y servicios. En ese sentido, la Organización trae una serie de estándares para empresas de diferentes segmentos y tamaños. Existen normas de la familia ISO 9000 enfocadas al sistema de gestión de la calidad, ISO 14001 enfocada al sector Medio Ambiente, ISO 22000 relacionada con la seguridad alimentaria, entre otras.
Definir por qué certificaciones ISO apostar depende mucho del segmento en el que se opere. Además, los objetivos corporativos influyen en esta decisión. Por lo tanto, debe pensar en lo que quiere lograr con el documento.
Para señalar e identificar las empresas que cumplen con las normas, existe la Certificación ISO, proceso donde se evalúa a la empresa para analizar si cumple con los requisitos de las normas correspondientes a su nicho.
Después de recibir este reconocimiento, las organizaciones aprobadas deben renovar sus licencias. Es decir, los datos están actualizados. Si la empresa no mantiene el nivel, perderá su autenticación.
Mira cuáles son las fases:
- Diagnóstico: mapea el escenario actual de la empresa y lo compara con las reglas del estándar deseado;
- Planificación: crea un cronograma de las acciones necesarias para la implementación del sistema que estará de acuerdo con las reglas;
- Implementación: puesta en práctica de las medidas definidas en la fase anterior;
- Auditorías: las empresas que deseen el certificado deben elegir una empresa auditora certificada por ISO y ABNT. Este organismo certificador, luego de evaluaciones detalladas, emitirá o no el documento.
Pero aún hay ganancias internas: generalmente, al adaptarse al modelo ISO, una empresa aumenta su productividad, mejorando sus procesos y la satisfacción del público.