En resumen, ISO 14000 es una serie de estándares internacionales sobre gestión ambiental. Estos estándares, también conocidos como Sistema de Gestión Ambiental (EMS), contienen una serie de pautas sobre auditorías ambientales, evaluaciones de desempeño ambiental y análisis del ciclo de vida del producto.
La preocupación por las cuestiones ambientales ha ido ganando un espacio expresivo en el mercado. Según datos de la Encuesta ISO 2020, la ISO 14001 registró un aumento del 11,5% en el número total de certificados válidos a nivel global, respecto al resultado del año anterior.
Del conjunto de normas, la ISO 14001 se encuentra entre las más conocidas y especifica los requisitos para un Sistema de Gestión Ambiental (SGA) efectivo, que acredite la responsabilidad en el desarrollo de las actividades de una organización.
Los demás estándares de este conjunto no son estándares de certificación, sino estándares de apoyo. Proporcionan información valiosa para complementar la comprensión teórica y práctica de la aplicación de la norma ISO 14001. Vea cuáles son:
- ISO 14004: proporciona una guía para la implementación exitosa de ISO 14001. Este estándar ayuda a su equipo a comprender cómo cumplir con los requisitos de ISO 14001 en función de las buenas prácticas de gestión.
- ISO 14020– Establece principios generales para el etiquetado de productos, indicando sus aspectos e impactos ambientales, y para otras declaraciones ambientales de la empresa.
- ISO 14031– Establece lineamientos para medir, monitorear y analizar el desempeño ambiental de una organización. Siguiendo estos lineamientos, su empresa determinará y medirá indicadores de desempeño ambiental y podrá delinear estrategias para su mejora.
- ISO 14040- Esta norma orienta el análisis del ciclo de vida de los productos, procesos y servicios de una organización para comprender los aspectos e impactos generados en sus interacciones con el medio ambiente, desde la extracción de los recursos naturales hasta la disposición final de los desechos y desechos.
- Guía ISO 64 – Proporciona orientación sobre los aspectos y cuestiones ambientales que deben ser considerados por los desarrolladores de normas técnicas para productos, de modo que contribuyan a la reducción de los impactos ambientales en su proceso de producción.
Los principales beneficios de ISO 14000:
Implementación de políticas garantizada: la empresa está obligada a cumplir con las políticas ambientales y seguir sus objetivos para lograr metas reales;
– Aumento de alianzas: las empresas vinculadas a preocupaciones ambientales logran mejorar su imagen en el mercado y tienden a obtener más alianzas comerciales;
– Clientes más satisfechos: con ISO, los clientes tienden a estar más satisfechos, ya que las empresas que operan con dichos estándares tienen procesos estandarizados y un buen sistema de gestión de calidad;
– Reducción de costos: reduce costos con materia prima y eliminación de desechos;
– Fortalecimiento de la imagen pública de la empresa: la comunidad actúa positivamente con empresas certificadas con la norma ISO 14000.
Las empresas que buscan incrementar la calidad y estandarización de los procesos basados en la norma ISO de mejora continua, pueden optar por implementar varias normas simultáneamente, como la ISO 9001, ISO 14001 e ISO 45001, por ejemplo.
La mayoría de las grandes empresas se están moviendo hacia el gobierno corporativo, englobando varias regulaciones y esta es una tendencia del mercado.
Pero mucho antes de llegar a este nivel, pasaron por varias etapas que incluyen la maduración y consolidación de normativas dentro de la organización, como la ISO 9001, que es considerada la norma madre para todas las demás certificaciones ISO.